Usamos métodos de prospección e instrumentación geofísica de avanzada en los diferentes servicios que ofrecemos
Con el radar de penetración del suelo un campo electromagnético inducido permite realizar tomografías 2D y 3D del subsuelo de muy alta resolución, a profundidades desde 0m hasta 50m o más. Este método permite realizar estudios en tiempo real para detectar tuberías realizar estudios forenses y arqueológicos, control de calidad de estructuras, vías, túneles, minas, carreteras, puentes y aeropuertos. También es usado para realizar estudios geológicos y geotécnicos de estratigrafía, batimetría en lagos y ríos, ubicación de acuíferos y mapeo kárstico entre otros.
El método magnético estudia el campo magnético producido por los cuerpos y estructuras en el subsuelo, su intensidad depende del contenido de magnetita y materiales magnéticos en ellos. Permite ubicar zonas y cuerpos minerales, zonas de falla y modelar estructuras geológicas a pequeña y gran escala. El método gravimétrico aprovecha las variaciones en el campo de gravedad producidas por las variaciones de densidad asociadas a la litología y estructuras bajo el subsuelo, tales como cavernas, minerales, cuencas hídricas y petroleras. El estudio conjunto de los métodos magnético y gravimétrico permite discernir objetivos geológicos con menor incertidumbre.
Ubicación de estratos consolidados y lechos rocosos, aplicaciones en minería,
estratigrafía y geotecnia, Caracterización de suelos bajo la norma NSR-10, Registro sísmico de Voladuras comparación con la Norma DIN4150.
Los métodos de prospección geoeléctrica estudian el comportamiento de corrientes eléctricas naturales e inducidas para determinar la resistividad eléctrica del subsuelo, esto puede ser aprovechado para crear una tomografía que puede ser usada para ubicar sulfuros masivos, minerales, acuíferos y plumas contaminantes, y anomalías asociadas a la estratigrafía del subsuelo, entre otras.
Mapeo de cuencas
petroleras
Ubicación de fallas
geológicas
Yacimientos mineros y
localización de minerales
Este método es aplicado para realizar batimetría en el mar, lagos, ríos y estudiar estratos bajo el lecho de ellos. Ondas acústicas de alta frecuencia son transmitidas, reflejadas por los objetivos y registradas por sensores que miden el tiempo de viaje de las mismas, para así generar una imagen en tiempo real de los objetivos presentes bajo el agua.